¿POR QUÉ SI LOS ASTROS USASEN 'WAIBI SABERMETRIC SYSTEM', NUNCA HABRÍAN CONTRATADO A GURRIEL POR 47 MILLONES?
EL SÍNDROME DE OPORTUNISMO SEGÚN WAIBI (Primera Parte)
En esta primera parte hacemos
referencias a:
- Análisis del Rendimiento desde el punto de vista Waibi
- Análisis del performance de Yulieski en los eventos más difíciles
- El Síndrome de Oportunismo
- Las dudas de los Astros, las respuestas de Waibi
- Las Ciencias Médicas y el método de análisis de Waibi. El Diagnóstico del jugador y la Solución del problema.
Nuestro pronóstico se va cumpliendo con Gurriel, como sucedió con Abreu. Cito: “Esperemos que podamos ver brillar finalmente a Yulieski en un torneo de máximo nivel, aunque nuestro pronóstico no es que suceda esto. Solo PODEMOS ASEGURAR que, a pesar de que en Cuba Yulieski rompió varios records, y Abreu muy pocos, Yulieski no logrará emular las grandes actuaciones de su compatriota en la MLB. Y es probable que tampoco la de otros como Puig, Ramírez o Céspedes. (publicado el 5 de agosto de 2016, después de su primer partido en Ligas Menores, clase A)
Seguimos insistiendo en nuestro concepto fundamental. Waibi Sabermetrics es un sistema de estadísticas de selección, y
no de estadísticas de rendimiento (históricas). Las estadísticas hasta hoy,
incluidas las sabermétricas (al menos las públicas) pertenecen casi en su
totalidad al segundo grupo, pero son utilizadas como si pertenecieran al primero.
Para comprender rápidamente la diferencia, diremos que si todos los bateadores de
una liga conectan 10 jonrones, 20 dobles y 50 sencillos en 240 veces al bate,
todos sus datos darían exactamente lo mismo: AVG (.333), SLG (.542), wOBA(.372),
BABIP(.304), etcétera. Por tanto, el análisis desde este punto de vista
limitado, nos llevaría a elegir a cualquiera de ellos para un torneo de mayor
dificultad, asumiendo que TODOS TIENEN LA MISMA CALIDAD. Esto, sin embargo, no
nos permite saber QUIÉN TIENE MAYORES PROBABILIDADES DE ÉXITO.
Las Estadísticas de Selección por el contrario, nos
darían números diferentes aunque todos tuvieran exactamente el mismo
rendimiento. A veces incluso hacia extremos opuestos, como sucedió con nuestros
jugadores modelo-inicial Abreu y Gurriel, y que nos permitió acertar en los
pronósticos. Una estadística de selección es aquella que permite prever el
rendimiento en un torneo de mayor nivel, utilizando datos de un torneo menor.
Se enfoca en el “Cómo”, y no solo en el “Qué”. Su margen de error es
visiblemente más pequeño que el de una estadística histórica. Es el “Cómo” (las
circunstancias en que se logra el resultado) lo que hace la diferencia. La Sabermetría
actual se comporta PARCIALMENTE como estadística de selección, solo dentro de
una misma liga. Pero cuando se trata de pasar jugadores de una liga a otra (por
ejemplo, de AAA a MLB), queda prácticamente ciega, como hemos ido demostrando.
Hemos explicado los Síndromes de Default y Promedio en respectivos artículos. Debido a que nuestro software ya está en fase de
pruebas, hoy abundaremos en otros fundamentos del funcionamiento de Waibi.
EL SÍNDROME DE OPORTUNISMO
EN_EL_MUNDO_WAIBI...: EL CAZAFANTASMAS DIJO: “EL SÍNDROME DE OPORTUNISMO ES COMO UN FANTASMA QUE VIVE EN NUESTRA CASA, PERO NI SIQUIERA SOSPECHAMOS QUE EXISTE. PERO EL PROBLEMA NO ES QUE HAYA UN FANTASMA, SINO CUÁNTO LOGRA MANIPULAR NUESTRA VIDA SIN QUE LLEGUEMOS A SABERLO. ES DECIR, LA MAYORÍA DE LOS JUGADORES TIENEN ALGÚN GRADO DE OPORTUNISMO; EL PUNTO ES CUÁNTO DICHO OPORTUNISMO CONTROLA SU RENDIMIENTO.”
La tabla muestra el rendimiento de varios bateadores
cubanos, en su mayoría sluggers, en su última temporada en Cuba.
Evidentemente, con tales datos, si todos los jugadores
tuvieran la misma edad y condición física, un equipo de béisbol profesional
daría, por mucho, el mejor contrato a Gurriel. En cierto modo es lo que ha
sucedido en la práctica. Es un bateador de otro planeta desde las estadísticas
de rendimiento. Por tanto se espera ERRÓNEAMENTE que en un torneo de mayor
exigencia, sea el que logre también el mejor resultado. La razón es que ni los
técnicos, ni la Sabermetría actual han logrado explicar estas dos Grandes Preguntas:
- ¿Por qué de dos jugadores que han jugado en la misma liga menor en el mismo momento, donde el jugador “A” ha tenido mucho mejor rendimiento que el “B”, es el “B” quien logra ser más efectivo al ser ascendido a las Mayores, contrario a lo que se esperaba, mientras el aparentemente mejor (A) fracasa?
- ¿Podríamos anticipar qué jugador tiene más probabilidades de comportarse como el A o como el B?
Waibi Sabermetrics es la
respuesta a ambas cosas.
Veamos ahora cómo debutaron estos jugadores en la MLB.
Comencemos por lo obvio:
1. El proceso de adaptación es
distinto para cada jugador. En el caso específico de los cubanos, el entorno,
el idioma, la familia, el contexto de emigrante, y el salto brusco a otro nivel
de Béisbol son altamente influyentes. Añadamos que la incertidumbre del “ todo
o nada”, abre una peligrosa puerta psico-emocional, que puede ser determinante,
pues los peloteros cubanos, al abandonar la isla, están explorando al mismo
tiempo un “nuevo” mundo, hasta entonces desconocido. La adaptación es, por tanto, más
compleja.
Sin embargo es precisamente
Yulieski el menos afectado por esta situación:
- Es el que más experiencia internacional acumuló mientras vivió en Cuba, incluyendo los tres primeros Clásicos Mundiales, el Premier 12, y todas las Series del Caribe desde el regreso de Cuba a estas.
- Ha sido el único contratado previamente por una liga profesional de alto nivel, al vestir la franela del japonés Yokohama DeNA BayStars, donde tuvo un buen performance.
- Por la razón anterior, sabe lo que es intentar adaptarse a otra cultura y manera de entender el juego y la vida.
- Ha sido el único, que sepamos, acompañado por sus familiares en el proceso de adaptación.
Resumiendo, es de todos el que ha tenido una
oportunidad de adaptación progresiva más favorable, y con menos incertidumbres.
2. El momento deportivo también determina. Pero, si bien
es cierto que Gurriel debutó tras estar algún tiempo sin jugar, la mayor parte
de los otros jugadores cubanos también.
3. Pudiéramos pensar entonces que es porque los debuts han
ocurrido en años distintos. La entrada, salida e intercambio de jugadores, y
otros factores, hacen que cada temporada tenga características algo diferentes.
Veamos entonces el comportamiento de varios de estos jugadores en la misma
temporada, 2016.
¡ El rendimiento de Gurriel sigue siendo de los más bajos!
4. Lo más lógico sería entonces pensar en una adaptación lenta. Sobre todo porque sus datos en algunos torneos internacionales supuestamente avalan su nivel para la alta competición.
Pero ¿cuán diferentes serían nuestras expectativas desde la lógica de Waibi Sabermetric System? Usemos las
competiciones más importantes (y duras) en las que Gurriel ha participado antes
de su ingreso a los Astros de Houston.
I Clásico Mundial de Béisbol 2006
Explota la sensación. Yulieski integra el All Star
como mejor segunda base, con 9 hits en 33 AB, 2 jonrones y 2 dobles, 6 RBI, y
AVG/OBP/SLG de .273/.342/.515.
En primer lugar debemos recordar, y esto es MUY
IMPORTANTE, cómo se escogen los All Stars, y principalmente el MVP de cada
torneo. Esta NO es una elección objetiva, sino por el contrario, MUY SUBJETIVA…
No es una decisión estadística sino mediática. ¡¡Hablamos de un reconocimiento que se obtiene por VOTACIÓN!!! Quiere
decir, que pesa más cuán buena es la impresión causada en los votantes, que la
efectividad real del jugador. Es un voto "político". Por tanto, para un manager, scout
o director técnico, el integrar un All Star no debe ser determinante para
elegir a un jugador sobre otro, sino simplemente un dato complementario.
Por otro lado, la gran impresión causada por el equipo
cubano al conquistar el subcampeonato, confundió a muchos hombres de Béisbol. La explosividad, las
ganas y el espíritu de equipo eran las fuerzas más importantes. Como siempre, LO
ÉPICO NOS SEDUCE MÁS QUE LO OBJETIVO. Por
eso, algunos elementos circunstanciales no se toman en cuenta cuando se
interpretan los números, siendo sin embargo, determinantes para escoger un
jugador para nuestro equipo de Béisbol:
- MOMENTO DEPORTIVO: En el primer WBC, los cubanos estaban en plena forma. Incluso interrumpieron su campeonato oficial para acudir al Clásico. La mayor parte de los jugadores de las Grandes Ligas, se tomaron el torneo como inicio de su entrenamiento de primavera. Regresaban de sus vacaciones.
- SCOUTING: Los cubanos tenían acceso a información detallada de sus rivales de las Mayores, tanto en video como en estadísticas sabermétricas. No así de los rivales menores, debido a que jugaban en ligas poco publicitadas. Los equipos enfrentados no conocían a los cubanos. Mucho menos, podían aprovechar las estadísticas de las Series Nacionales cubanas, debido a que desde la isla no publicaban información de datos en la web, en la época.
- TORNEOS CORTOS: Con los años, Cuba se especializó en disputar torneos cortos. Es un sistema de juego completamente distinto, donde hay que ajustar estrategias en muy poco tiempo. No basta saber jugar al Béisbol. El instinto y la capacidad para mover a los jugadores es determinante la mayoría de las veces. Esta experiencia les ayudó mucho en el avance hacia el subcampeonato, con un mejor manejo de los lanzadores y el line up que sus rivales.
Por eso, aunque Cuba haya obtenido un merecidísimo segundo
lugar, la subjetividad NO DEBE hacernos creer que tenían los segundos mejores jugadores.
El espejismo en el caso de Yulieski, está además en que sus datos ofensivos sobresalientes fueron obtenidos en los dos primeros partidos, ante Panamá, y Holanda, que era todavía un equipo sin protagonismo internacional. Después de esos dos partidos, los lanzadores no le permitieron libertades, principalmente en los juegos de presión. Tampoco dio otros extrabases. Sin embargo, fue votado al All Star, por la buena impresión de los dos primeros matches, y por su oportuno desempeño a la defensa. Como detalle alarmante, baste decir, que de 8 juegos, en los últimos 6 solo impulsó 1 carrera, y fue a sí mismo, con un cuadrangular en solitario. ¡¡No logró traer a NINGUNO DE LOS CORREDORES QUE ENCONTRÓ EN BASES EN LOS TRES CUARTOS (75%) FINALES DEL TORNEO!!!
Del II Clásico no tenemos información detallada ni
videos abundantes de Gurriel. Fue aparentemente su mejor performance en WBCs. El sitio oficial, desafortunadamente, inicia los “play
by play” en 2013, correspondiendo al III Clásico.
III Clásico Mundial de Béisbol
2013
A diferencia del primero y del segundo, los equipos
asistieron mejor preparados, a pesar del momento en que sucedieron, respecto a
los torneos regulares. Es la causa principal por la que Cuba se fue retrasando
en la tabla a medida que se hicieron nuevas ediciones del Clásico. Esto
permitió evindenciar un nivel más cercano a la realidad.
Durante el torneo la figura de Yulieski fue, una vez
más, la más criticada desde la isla, debido a su intrascendencia en eventos
internacionales, en comparación con su descomunal performance en las Series
Nacionales. Por ello fue movido constantemente en el line up, entre los puestos
segundo y séptimo principalmente.
Es en este período
donde nace Waibi Sabermetrics System,
que buscaba entender las incongruencias del rendimiento de varios jugadores respecto
a otros, al enfrentar torneos más fuertes. Los datos fríos de Gurriel eran
increíbles, pero al procesarlos con nuestro sistema aún incipiente,
pronosticamos un performance en el WBC de la media hacia abajo, debido a su mal
BQI (Batting Quality Index o Índice de
Calidad de Bateo, fórmula Waibi).
Los jugadores se tomaron el III WBC en serio. Por tanto la calidad, y la dificultad
fue mucho mayor. Al haber mayor concentración de la calidad, y ser Gurriel un
bateador efectivo selectiva y preferiblemente ante pitchers de menos nivel, sus números en el Clásico bajarían en manera
importante, a menos que los pitchers rivales no tuvieran un buen rendimiento en
sus salidas.
Donde P's GOBP es el Pitcher's Game OBP (OBP del pitcher en el partido).
El caso de Tanaka, es bueno acotar, que relevó para entrar en forma, en un partido en que ambos rivales estaban clasificados. Tanaka abrió permitiendo hit y doble. Después solo un sencillo más, acompañado de seis ponches soberbios, entre los que se encontraba Gurriel. El chino Yu Liu fue prácticamente el único lanzador con mala salida al que Gurriel no le conectó indiscutible. Noris enfrentó solo a dos. El resto contra los que solo falló, tuvieron todos buenas actuaciones. Por el contrario, todos sobre los que obtuvo indiscutible, tuvieron malas salidas. Es un caso de Oportunismo extremo, muy raro.
Obviamente, está también ligado a la presión
psicológica que viven los peloteros cubanos en estos torneos, por el modo en
que se vive y se maneja el Béisbol en Cuba. El fenómeno mediático, el contraste del
rendimiento, y los desvaríos de la prensa deportiva, fueron lo que nos llevó a
poner nuestra lupa sobre Gurriel. Tuvimos suerte de haberlo seguido desde su
primera Serie Nacional, porque de lo contrario nunca nos habríamos hecho estas
preguntas. Es un caso extremadamente raro.
Como se ve, su aporte ofensivo al equipo fue bajando, en la medida que
aumentaron las exigencias de la competición. Después del Clásico,
Yulieski retomó su ritmo habitual como slugger e impulsador en la Serie
Nacional, interrupta para asistir al torneo. Era como si el Clásico nunca
hubiese existido. No era, por tanto, UN SLUM.
El Beisbol Japonés
Antes de su paso por Japón, Yulieski fue asignado a los Industriales de La Habana, que como los New York Yankees, es un equipo sometido a presión en todos los partidos de la temporada. Todos quieren vencerlos. Los 90 juegos de la etapa regular son muy fuertes para el equipo. ¿Para qué hablar de los play off? Esta presión permanente, y jugar en la sede donde antes fue más repetidamente silbado y abucheado, le ayudó a madurar psicológicamente. Sus datos se potenciaron más. Esto coincidió con un descenso de la calidad de la liga, por múltiples razones.
Al año siguiente, en 2014, Yulieski fue contratado en el Beisbol japonés, el segundo mejor del mundo. Nos sorprendieron sus números: 73 hits en 239 AB, 20 dobles, 11 jonrones, AVG/OBP/SLG de .305/.349/.536, y 30 RBI. Pensamos entonces que los japoneses (que son extremadamente técnicos) le habían corregido algunos errores... O quizás la liga japonesa no era tan fuerte como habíamos pensado hasta entonces. Después de todo nuestros referentes eran los mismos torneos internacionales donde Cuba tenía buenas actuaciones con sus equipos nacionales, a pesar de tener una liga de calidad entre AA y AAA. Este es un error frecuente (también default), donde se valora la liga de un país, por la calidad de su equipo nacional. Entendimos que muy probablemente, Cuba está mucho más cerca de la liga japonesa, que la japonesa de la MLB.
Fue precisamente en el béisbol japonés donde tratamos de verificar una parte de nuestra teoría inicialmente, pero no existe información estadística pública suficiente. Obsérvese la tabla de frecuencias (inferior). Como se resalta en rojo, Gurriel que tuvo un aparente buen performance, fue el que menos jonrones por oportunidad produjo (HR/AB). Fue una vez más el menos efectivo empujando carreras. Aunque su average fue de 0,305, empujó apenas 0,13 carreras por vez al bate. Increíblemente estuvo peor que Cepeda, que logró solo AVG de 0,194, pero 0,17 impulsadas por AB.
Precisamente, el monto del contrato de Gurriel está basado en su capacidad como slugguer. De ahí que los Astros de Houston esperen que él produzca muchas de las carreras necesarias, principalmente mediante extrabases. ¡ Después de todo, conectó 11 jonrones en la serie NPB, con un gran average! Pero desafortunadamente para los Astros, utilizaron el sistema estadístico convencional (estadísticas de rendimiento), y no Waibi (estadísticas de selección). Como
quiera que el monto del contrato MLB de Gurriel estuvo basado en su condición
de slugger, veamos su performance en el acápite de los jonrones, su punto más
fuerte como bateador, y donde logramos reunir los datos del NPB artesanalmente.
¿Sorprendente, no? ¡¡logró solo 12 RBI con 11
vuelacercas!!!! Un dato más alarmante
aún, que no podemos detallar desgraciadamente es que ¡produjo menos impulsadas
que extrabases! ¡¡30 con 31!! Y esto ocupando la parte alta del line up, que
habitualmente encuentra más corredores en circulación, y sabiendo que el
corrido de las bases es uno de los puntos fuertes del béisbol japonés. Mmmhhh,
algo está pasando aquí… Nótese también que la máxima velocidad fue 90,7 M/H (cerca
de la recta promedio en la Liga cubana), los lanzamientos fueron todos en una
zona cómoda de batear, y solo en una ocasión estuvo debajo en el conteo.
Ocurrieron en momentos no-complicados para el lanzador, donde como mostramos
en el artículo sobre el wOBA y el Síndrome del Promedio, estos no se aplican al
100 %, generando así ventajas para el bateador. Recordemos la gráfica de la
distribución de jonrones por Estado Base/Outs, diseñada por Waibi para nuestro
artículo sobre el wOBA de Tom Tango, y el Síndrome del Promedio.
Recordemos que el Estado B/O grupo 1 corresponde a la situación de bases limpias. El 2,3 y 4 se producen cuando hay un corredor en circulación; y el 5,6,7 cuando hay dos. El grupo del estado 8 corresponde a las bases llenas. Los puntos "verdes" son las situaciones sin outs, los "amarillos" con 1 out, y los "rojos", representan las situaciones con dos outs. En total son 24 Estados Base/Outs.
Como se aprecia, es
muchísimo más fácil dar un vuelacercas (o cualquier tipo de hit INTENCIONAL)
cuando el pitcher tiene las bases limpias sin outs, que cuando tiene hombres en circulación. La proporción entre los estados es muy variable también. Te sugerimos leer nuestro artículo para mejor comprensión, pues la gráfica por sí sola solo muestra información parcial.
Para llegar a esta gráfica (y este
tipo de conclusiones) partimos de la perspectiva del jugador de Béisbol, y no de un
precepto estadístico. Si el planteamiento teórico era correcto, la estadística
lo confirmaría. Y así sucedió. Usualmente, en la Sabermetría se parte de un
razonamiento donde lo matemático tiene más peso que lo psicológico, de ahí que
estos comportamientos pasen inadvertidos. Es porque se tiende a leer el juego
desde la rigidez de la fórmula y no desde la flexibilidad de lo que intenta
hacer cada jugador en cada momento específico del juego.
Serie del Caribe, 2015. Cuba
Campeón!
¡¡Jonronazo de Yulieski!! No tan épico como los de su
padre Lourdes, conocido en Cuba como el Jonronero de los Grandes Momentos. Cuando Yobal Dueñas decidió la final
del Campeonato Mundial en La Habana, con un jonrón descomunal ante Corea, cuenta el propio
Yobal, que Lourdes le gritó algunas indicaciones durante su turno al bate. Lourdes fue un gran
bateador de la recta pegada, posiblemente el lanzamiento regular más incómodo de
batear en los años 80. Quien ha visto a
Yulieski jugar al Béisbol, nota enseguida que su técnica es muy
buena frente a este tipo de lanzamiento. Es el que él mejor batea, contrario a la
mayoría de los peloteros. Por tanto, un pitcher lanzaría a la zona alta
interior solo ocasionalmente, con la intención de sorprender al bateador. Esto
sabiendo que tirarla dos veces por dentro ante este bateador ESPECÍFICO es un
suicidio. Esta es su especialidad.
Veamos la secuencia
de lanzamientos del pitcher mexicano.
Por ello, haber decidido la final de la Serie en este
modo tan emocionante, nos crea una inevitable SUBJETIVITY, que generalmente
condiciona el juicio que hacemos de un jugador, EN EL MISMO MODO QUE SUS ESTADISTICAS DE RENDIMIENTO. Que sea épico no quiere
decir que sea nuestra mejor opción. ¡Incluso un reloj roto muestra la hora correcta dos veces al día!
EN_EL_MUNDO_WAIBI... EL RELOJERO DIJO: "EL SÍNDROME DE OPORTUNISMO ES COMO CUANDO VIAJAS HACIA EL OESTE TARDANDO UNA HORA PARA ATRAVESAR CADA HUSO HORARIO, Y TU RELOJ ANALÓGICO MUESTRA SIEMPRE LA HORA CORRECTA... ESO NO QUIERE DECIR QUE TU RELOJ TRABAJA PERFECTAMENTE, SINO QUE ESTÁ ROTO"
El debut en Las Mayores
Veamos ahora lo acontecido en el debut en Las Mayores,
respecto a los extrabases, donde afortunadamente tenemos acceso a la mayoría de
los datos necesarios. Repetimos: este punto es el más importante en el caso
Gurriel, pues es lo que supuestamente justifica el supercontrato de 47
millones. Fue asumido por su capacidad como slugger.
Como se observa, el patrón se repite. ¡¡9 de los 10
extrabases se produjeron en malas salidas de los lanzadores!! Esto,
independientemente de la calidad de ellos. Solo uno ante una salida promedio. Para saber si esta fue buena, debemos analizar el SLG del pitcher, no solo el OBP.
Igualmente la velocidad señala solo dos envíos entre 95-93 millas. Y esto
gracias a los ajustes logrados en su preparación.
Pero... hay otro "pequeño detalle" más escondido: ¿Cómo fue el aporte ofensivo cuando los Astros más lo necesitaron: la
disputa del Wild Card? Faltando 10 juegos para cerrar la temporada regular, la
situación era: Blue Jays (83-69), Orioles (82-70), Tigers (80-70), Astros
(81-71), Mariners (80-72) y Yankees (79-72) estaban luchando fuertemente por el
Wild Card. Los más lejanos de los Astros, eran los Yankees, a 1.5 juegos de diferencia.
En esos 10 partidos restantes, enfrentaron a los Angelinos en muy buena racha,
y a los Mariners que luchaban también por el Wil Card.
Houston finalizó con 5 juegos ganados menos (84) que los clasificados Blue
Jays y Orioles (89). Quiere decir esto, que los últimos 5 juegos, ya el Wild
Card estaba definido para los Astros. Los
Mariners finalizaron con 86 ganados, por lo que tuvieron posibilidades hasta
antes de los 3 últimos juegos. Y tal definición para Seattle ocurrió precisamente mientras
enfrentaban a los Astros. Es decir, de los últimos 12 partidos de los Astros,
los 9 primeros fueron partidos de tensión y con pitcheo difícil, mientras los 3 últimos (incluyendo
el último frente a Seattle) fueron de puro trámite. . Ni los Astros, ni el
rival, tenían ya nada en juego. Veamos cómo Gurriel distribuyó su performance en la recta
final.
Sobra cualquier comentario.
Este patrón es lo que Waibi reconoce como SÍNDROME
DE OPORTUNISMO. ¡¡Y es INDETECTABLE desde las estadísticas actuales!!! Solo
un sistema como Waibi permite esta
lectura, gracias a su algoritmo, en el que continuamos trabajando para afinar
su precisión.
Hay muchos factores que influyen en este síndrome.
Algunos ya fueron expuestos en nuestros artículos. Otros serán abordados en el
documental explicativo sobre los fundamentos de Waibi, actualmente en
producción.
Ahora, las dos preguntas que preocuparían a los Astros
de Houston, después de arriesgar 47 millones:
1. ¿Quiere esto decir que Yulieski no tiene capacidad
para jugar en la MLB?
¡¡NOOO!!! No quiere decir esto en lo absoluto. En su
caso específico, es todo lo contrario. Explicamos más adelante.
2. ¿Tiene solución el problema de Gurriel?
¡SÍ! ¡Definitivamente, sí!!
Y aquí está otra utilidad de Waibi como concepto, El
Diagnóstico del Jugador. Es lo más complejo, pues interpretando los números y
las gráficas en modo correcto, se puede deducir donde pudieran estar los
problemas. Funciona del mismo modo en que un médico sabe orientarse a partir de
ciertos tipos de síntomas y/o signos del paciente que analiza. Veamos un
ejemplo práctico de nuestra profesión, que resulta más ilustrativo.
Los médicos enfrentamos constantemente pacientes
específicos, particulares. Nunca la enfermedad. La enfermedad se manifiesta en
manera distinta en cada cuerpo, pero repite un número importante de
características. Para curar una enfermedad, los médicos primero compilamos
datos en una entrevista, para saber por dónde comenzar. El modo de enfoque de
la propia profesión, nos lleva a establecer un riguroso Diagnóstico
Diferencial, donde se descartan en primer lugar, las enfermedades que comparten
estos síntomas signos, pero que también incluyen otros determinantes que no
están presentes. Con este descarte reducimos el número de posibilidades.
Ahora, supongamos que un paciente masculino refiere “agotamiento”
(síntoma) y le vemos “pálido” (signo). Pensamos en todas las posibilidades,
principalmente las que tienen un criterio UNICISTA (uno que explique los dos
juntos, y no dos que los expliquen por separado). El paciente podría, por
ejemplo, estar “pálido” porque sea el color natural de su piel, y “agotado”
porque padece de insomnio, tiene un trabajo estresante, o de mucha intensidad
física o intelectual. Esto lo descartamos mediante la entrevista, la
observación y el examen físico.
Luego, un rutinario examen de laboratorio nos alerta de que la hemoglobina se encuentra baja.
Por ejemplo 12,5 g/dL. Esto podría corroborar nuestra sospecha de
algún tipo de Anemia. Sin embargo, LA COSA INTERESANTE es que antes de asociar este dato “contundente” a
la enfermedad, es conveniente asociarlo a la Fisiología. ¿A la Fisiología? Por
ejemplo al género (sexo) ¿Qué? Pues sí. Porque una mujer con estos números, haría
pensar en otras causas más probables, pues es normal en ellas (mínimo 12,3
g/dL). No así en hombres, donde el valor inferior normal es 14 g/dL. Esta es una
de nuestras primeras diferenciaciones más importantes. Por simple que parezca,
este “pequeño” detalle del género, puede arruinar todo el diagnóstico si no es
tomado en cuenta.
En Béisbol, NO BASTA EL NÚMERO FRÍO PARA UN DIAGNÓSTICO. NECESITAS
ANALIZAR PRIMERO LAS CIRCUNSTANCIAS. Sería tan vital como identificar la
función ofensiva correcta para la que está capacitado un bateador, atendiendo
no solo a su somatotipo y datos aislados, sino también a su biomecánica, su
mentalidad, su capacidad de ajustes, improvización, lectura del juego, etcétera.
Entonces, si el paciente es hombre, y por tanto la
hemoglobina registrada SE INTERPRETA como baja, se analizan entonces todas las
causas de Anemia, tanto agudas como crónicas. Por ejemplo, si la anemia es por
falta de hierro (ferropénica), megaloblástica, siklémica, por traumatismos que
producen pérdida importante de sangre (heridas, sangramientos digestivos,
hemorragias internas,…) etcétera.
En Béisbol sería, por ejemplo, diferenciar
si el jugador está pasando un mal momento deportivo (agudo: generalmente
psicológico, o físico), o si es que no logra rendir por una incapacidad
permanente (crónico: generalmente técnico).
Una vez definida la causa, se comienza el tratamiento ESPECÍFICO y
observación de la evolución. En caso de ser necesario, se sigue ajustando el
Diagnóstico tanto como sea posible, para obtener un mejor resultado.
Para Waibi,
el Béisbol no es muy diferente de la Medicina, o las Incursiones Espaciales.
Son todos universos paralelos. Por ello, los análisis para nuestras fórmulas se
desarrollan desde la lógica de la fisiología y la psicología del deporte, más
que desde la pureza de las matemáticas. Las matemáticas son solo el vehículo
para expresar en números un fenómeno extremadamente complejo, que contiene múltiples
disciplinas, por tanto, puntos de análisis también múltiples.
Como sucedió a Chadwick en el 1912, la sabermetría
como la conocemos hoy responde conceptualmente a un momento histórico en el que
las diferencias entre los jugadores y las ligas, incluso dentro de la propia
MLB, eran más marcados. Los datos eran funcionales no solo por la genialidad de
las fórmulas (que lo son) sino también por la bondad de los datos. Pero hoy es
necesario dar un paso más, debido a que se han perfeccionado mucho los
jugadores. Hoy la calidad es abrumadoramente más pareja, por lo que las debilidades de muchas fórmulas
comienzan a incidir en manera importante en el análisis, aumentando el error de
interpretación. Ya no es suficiente el mismo concepto que era funcional
años atrás. EL Béisbol es hoy. Entonces, se necesitan los conceptos de Hoy.
Volviendo al caso de Yulieski, sabemos que hay un
componente psicológico, pero este es secundario
a lo técnico. Su inseguridad aflora cuando no puede rendir, y no al revés
(que no rinde porque es psicológicamente inseguro). En su caso, su técnica de
bateo lo deja muy mal parado cuando sube la calidad del pitcheo. Su problema lo
arrastra desde su formación como
bateador en Cuba. Waibi, que
es un concepto global, y no solo números, ha podido identificar y focalizar
casi una decena de elementos, tanto en su estrategia de bateo, como en su
mecánica del swing, que impiden su éxito ante los lanzadores más difíciles. Sus
excepcionales condiciones fisiológicas naturales son las que le dan ventaja
sobre otros bateadores, y le permiten tener un rendimiento descomunal cuando
enfrenta a pitchers de menos calidad o en un mal día, o en momentos de una
buena salida donde el pitcher lanza sin presión debido al score. Es esto lo que
le da la posibilidad de obtener la mayor parte de sus estadísticas. No es que
no logre dar algún hit importante, o en una situación complicada. EL PROBLEMA ES LA PROPORCIÓN EN QUE LO HACE.
Sus compañeros no tienen en su mayoría su capacidad
natural, pero lo superan no solo a nivel técnico, sino también en concepto de
bateo. Por ello son más efectivos cuando enfrentan situaciones de mayor
complejidad. Abreu probablemente es el que combina mejor las dos cosas. También
otros no cubanos como Robinson Canó, David Wright, o Ichiro Susuki, entre otras
estrellas. Si Yulieski lograse eliminar estos defectos, probablemente NO bateará más de 15-20 jonrones por temporada, pero podría superar los 180
hits, e incluso, dependiendo de su disciplina en el home, los
200. SU producción de dobles aumentará considerablemente, no así los triples.
Pero necesita saber (él y sus entrenadores) cuales son
sus fortalezas y debilidades REALES como bateador. Luego debe asumirlas, y
trabajar en ello rigurosamente, y no seguir haciendo caso a una leyenda
estadística escrita en torneos menores, gracias a unas condiciones biológicas
excepcionales, pero que de poco valen sin el procedimiento justo. Su principal
enemigo NO es la edad, sino el largo tiempo que lleva reproduciendo los mismos
errores. Son errores que hace mucho se han convertido en reflejos
condicionados. Le sería más difícil (pero nunca imposible) hacer grandes
ajustes a su mecánica. Para su fortuna, su increíble fisiología precisamente le
ayudaría a eliminarlos con mayor facilidad que la mayor parte de los
bateadores. Solo así logrará triunfar en las Mayores como sus coterraneos. De
lo contrario, seguirá sin explotar en la gran carpa, a pesar del gran potencial
que tiene. Está también la posibilidad de que con pequeños ajustes pueda rendir
mucho, pero probablemente seguirá sin hacerlo ante los mejores. Dependerá de cómo se hagan las
cosas, y sobre qué especificidades trabaje.
Fin de la primera parte











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